En poco más de un mes llega la Navidad a nuestras vidas. Y una semana después, la Nochevieja. ¿Estás preparado?
Como puede que quieras aprovechar esos días para descubrir nuevos rincones (viajar en navidad es una experiencia única), te traigo los mejores planes.
Una serie de destinos para convertir estas fechas en algo único y diferente, una lista con las ciudades que hacen que viajar en navidad merezca la pena.
ROMA.
En la ‘ciudad eterna’ el espíritu de la Navidad está muy presente. El campo de Fiori y la Plaza Navona acogen unos impresionantes mercados navideños (el de Navona tiene más de cien años de antigüedad) y en la Plaza de San Pedro, en el vaticano, o en la Plaza de España encontrarás un espectacular Belén.
La noche de fin de año se cena lentejas y no hay rastro de uvas por ningún sitio. Si quieres llevarte un recuerdo original, compra una figura de la Bruja de Befana, que la noche del cinco de enero va por las casas dejando regalos a los niños.
LONDRES.
Otra de las grandes capitales europeas que debes tener en mente si quieres viajar en Navidad (y si tienes peques aquí te dejo una lista de planes para disfrutar al máximo de Londres). Las luces brillan con fuerza en Londres para iluminar calles, parques y centros comerciales.
Destacan el árbol navideño de Trafalgar Square y la fachada de los almacenes Harrods, pero no debes perderte la pista de hielo que montan bajo el London Eye o el Winter Wonderland, un mercado de Navidad en pleno Hyde Park.
PARIS.
La ‘ciudad de la luz’ tenía que figurar en esta lista a tener en cuenta si quieres viajar en Navidad. La monumentalidad de París es inimaginable cuando ofrece estampas de tal belleza como ver los Campos Elíseos iluminados o la noria que preside la Plaza de la Concordia.
Si quieres alcanzar el sumun del romanticismo, reserva mesa en uno de los restaurantes de la torre Eiffel.
ESTRASBURGO.
Seguimos en Francia, en concreto en esta encantadora ciudad que aúna tradiciones galas y germanas, y que cuenta con el Christkindelsmärik, el mercado navideño más antiguo de Francia.
El vino caliente y los deliciosos dulces te darán la energía necesaria entre tanta decoración navideña y numerosos belenes. Apúntate también el mercado Bredle y sus famosas galletas de Navidad, en la plaza de Austerlitz, y el mercado de los sabores de Alsacia, en la plaza des Meuniers.
BERLIN.
Y con el vaso de vino caliente podemos cruzar la frontera con Alemania y hacer una parada en Berlín para acompañarlo con la típica bratwurst en un puesto callejero. En la capital germana las luces de colores contrastan con el manto níveo que la nieve teje sobre las calles.
Además, decenas de mercados navideños se expanden por la ciudad y los árboles de la calle Unter Linden se engalanan con trajes de luces.
NUREMBERG.
Otra opción sin salir de Alemania. Y encima alberga el mercado de navidad más famoso del planeta.
Los puestos del Christkindlesmarkt son una auténtica exquisitez en la que puedes probar una delicia, el Lebkuchen. Dulce típico elaborado con bizcocho, especias y miel para que te relamas sólo de pensarlo.
VIENA.
El mercado navideño de la Rathausplatz es uno de los grandes símbolos de la capital de Austria. Pero no es el único, Viena acoge una decena de mercadillos tradicionales (algunos con más de 700 años de tradición).
Viajar en Navidad a esta emblemática ciudad te permite disfrutar del Palacio de Schönbrunn, la Karlskirche, el Palacio Belvedere o el Ayuntamiento con un hermosos manto de nieve.
SALZBURGO.
Cambia el imperial decorado de Viena por una navidad alpina en Salzburgo y tampoco te equivocarás. Sus clásicos pasacalles de Krampus y Perchten atemorizan con sus azotes de la suerte mientras que los recitales literarios y conciertos cultivan un ambiente menos prosaico.
Como no podía ser de otra manera, la música es omnipresente en la cuna de Mozart y del célebre villancico ‘Noche de Paz’.
BRATISLAVA.
El casco histórico de Bratislava parece sacado de un cuento de Navidad. Calles empedradas que serpentean y plazas con el castillo como faro en lo alto de la colina.
Si te gusta la artesanía, en la Plaza Mayor podrás hacerte con un recuerdo típico de la ciudad y, si eres goloso, siéntate en una cafetería a dar buena cuenta de los pastelitos.
BERNA.
Si hubiera un edén hecho de queso y chocolate, tendría que estar en Berna. Aunque la nieve cubre la ciudad durante todo el invierno, al viajar en navidad verás las casas decoradas y cómo la música de los villancicos se apodera de la capital suiza.
En el casco histórico te esperan originales mercados con artesanías y souvenirs, como el de la Plaza de la Catedral, y la pista de patinaje de la Plaza del Parlamento.
MOSCU.
La capital rusa es uno de los destino favoritos del frío pero no por eso la gente se queda en casa y no sale a vivir la Navidad. Aunque el calendario ortdoxo fija la fecha el 7 de enero, en vez del 25 de diciembre.
Ese día, los rusos hacen dieta a base de agua y semillas de trigo hasta que llega la hora del gran banquete de la noche. El árbol que preside la plaza del Kremlin y la pista de hielo más grande del mundo son dos atractivos añadidos para el turista.
ROVANIEMI.
La ciudad de Papá Noel podría encabezar cualquier ranking de ciudades a las que viajar en Navidad. Así que si puedes pasar estos días en la Laponia finlandesa y entregarle la carta en mano a Papá Noel, aprovecha la oportunidad.
Y si puedes hacerlo en familia, no lo dudes. Rovaniemi es lo más de lo más si hablamos de viajes inolvidables para los niños.
NUEVA YORK.
Clásico infalible, el árbol de navidad del Rockefeller Center o la pista de patinaje sobre hielo de Central Park son parte de nuestras vidas gracias a la industria del cine. Ponte en la piel de Macaulay Culkin y piérdete por la Gran Manzana.
QUEBEC.
Villancicos bilingües, en francés e inglés, artesanía en los mercadillos, una espectacular gastronomía canadiense, a base de vino, marisco y queso, y la ubicua nieve hacen de Québec un destino singular.
Si eres amante del dulce, podrás hartarte a barley candies (caramelos de malta) y chicken bones (huesos de pollo rosados con sabor a chocolate y canela)
Y esto es todo por nuestra parte, ahora es tu turno, ¿qué te han parecido estos destinos?¿te apetece viajar en navidad? Déjanos tu opinión aquí.