La cerveza irlandesa es una de las más populares en todo el mundo. Descubre sus marcas más conocidas y sus pubs con encanto.
Cuando se habla de cerveza, Irlanda es uno de los países que le vienen a uno a la cabeza, y no es para menos, teniendo en cuenta la fama que tienen sus marcas de cerveza y sus típicos pubs, que han traspasado las fronteras de la Isla Esmeralda. Tomarse una buena pinta es una de las mejores cosas que hacer en Irlanda.
A medida que se recorren los verdes paisajes de Irlanda y sus ciudades animadas y llenas de vida, también es recomendable parar en alguno de estos pubs, no solo para tomar una cerveza, también para sumergirse en la vida cotidiana de los irlandeses y, quizás, disfrutar de música irlandesa en vivo.
En Irlanda, la cerveza más popular es la stout, la cerveza negra. Se trata de una bebida hecha con cebada muy tostada que le da el característico color negro a la bebida y, además, la dota de una espuma y un cuerpo cremoso.
Por supuesto la cerveza de Irlanda más conocida es Guinness, hasta tal punto que se ha convertido en toda una institución en el país e incluso uno de los símbolos de la nación –en gran medida gracias a sus celebraciones de San Patricio por todo el mundo-. La fábrica de Guinness es una de las atracciones turísticas más importantes de Dublín, en parte por la historia de la cerveza y en parte por las preciosas vistas que se disfrutan desde su azotea, donde está situado el Gravity Bar, una parada casi obligada para los viajeros que se acercan a la capital irlandesa.
La historia de Guinness comienza en 1759, cuando se puso en marcha la fábrica de Dubín, que alquiló el cervezero Arthur Guiness por nada menos que 9.000 años. Desde entonces, la marca ha ido creciendo en popularidad hasta alcanzar los más de 10 millones de vasos consumidos al día, según la propia compañía.
También hay otras importantes marcas de cerveza irlandesa, como Murphy’s, otra stout, pero que, según los entendidos en cerveza, tiene un sabor algo más dulce que su competidora. Si Guinness tiene su sede en Dublín, el feudo de Murphy’s es Cork, la segunda ciudad del país.
Además de estas dos marcas, a lo largo de todo el país podrás encontrar multitud de cervezas artesanales que destilan en sus fábricas la esencia más pura de la cerveza irlandesa. Uno de los ejemplos más famosos es O’Hara, una marca afincada en las cercanías de Kilkenny que destaca por su sabor fuerte. Al ser cerveza artesanal se puede encontrar en unos contados pubs del país.
Dejando de lado la cerveza negra, también se puede mencionar Kilkenny –que obviamente, procede de esta ciudad-, de color rojizo, pero también de textura cremosa y que es muy apreciada por los propios irlandeses.
Además de estas cervezas, también cabe mencionar los pubs irlandeses, auténticos monumentos de cada ciudad en donde se vive de manera muy especial la vida en la isla. El mejor lugar para descubrir estos pubs es Temple Bar, un barrio de Dublín donde se encuentran decenas de bares y se palpa la actividad cultural más importante de la capital irlandesa.
En Cork, Galway e incluso Belfast también podrás encontrar multitud de bars y pubs animados con música tradicional y folklórica en la que podrás degustar la cerveza típica de cada región y sumergirte en el ambiente irlandés, quizás escuchando de boca de los paisanos sus fascinantes leyendas.